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Valeria Sernaque Guerra, Elmer Romero García

La verdad encubierta detrás de “En agosto nos vemos”


En un pequeño pueblo costero, donde el mar y la brisa se entrelazan en un baile eterno, se teje una historia de amor y nostalgia. Gabriel García Márquez nos transporta a un universo donde los recuerdos se entrelazan con el presente y donde el destino parece jugar un papel fundamental en las vidas de sus personajes. En agosto nos vemos nos invita a reflexionar sobre la fugacidad del tiempo, los lazos que nos unen a nuestro pasado y la inevitable presencia del amor en nuestras vidas. A través de su prosa envolvente y evocadora. El autor nos sumerge en un mundo de emociones y sentimientos profundos, donde cada palabra es un susurro al corazón y cada página es un viaje a la esencia misma de la existencia. Esta obra es mucho más que una novela, es un canto a la vida, al amor y a la eternidad de los momentos que atesoramos en nuestro ser.

 

Las actitudes de Ana Bach fueron de desagrado consigo misma por su físico; por ello, trató de arreglar su apariencia para sentirse mejor. En medio de la brisa nostálgica del transbordo de barco, ella anhelaba recapturar la sensación de juventud, la que parecía escaparse entre sus dedos. Se ajustó el bolso de mano con firmeza y prometió hacer lo que estuviera en su poder para sentirse joven de nuevo y mejorar su autoestima, lo cual logró satisfactoriamente. La razón primaria para hacer cambios en nuestra apariencia física debería provenir principalmente de un deseo interno, en lugar de buscar la aprobación externa. Es perfectamente válido buscar mejorar nuestra apariencia para sentirnos más seguros y felices, pero hacerlo exclusivamente para complacer a otros puede resultar insatisfactorio a largo plazo. Sentirse disconforme con alguna parte de nuestro cuerpo no significa que seamos poco atractivos; más bien, se debería resaltar la importancia de aceptar el paso de los años y el valor que deberíamos obtener de la madurez obtenida propia de los años. De ahí la importancia de la autoaceptación y la autenticidad en lugar de buscar la aprobación externa a través de cambios físicos. Ana Bach sentía que había envejecido mucho y quiso arreglar su apariencia física para sentirse mucho mejor consigo misma, hecho que lo consiguió. Toda persona no debe vestirse para los demás sino para consigo misma. No tiene nada de malo vestirse bien para tener una mejor aptitud, pero, por otro lado, solo porque se esté cansado de la apariencia no significa que ello sea sinónimo de fealdad, y también es importante que la persona que nos acompañe en el camino de la vida, nos acepte tal y como somos. Según Sanchis (2020) refiere que el amor propio es un aspecto fundamental de la personalidad, ya que determina el funcionamiento en muchos niveles. Facilitar su construcción y fortalecimiento es una tarea importante a considerar a nivel individual e incluso social para ayudar a construir una personalidad segura y confiada con altruismo y una alta empatía que promueva interacciones sociales saludables y de mayor apoyo. Con base al comportamiento de Ana Magdalena en “estirarse la cara frente al espejo para sentirse más joven”, se puede deducir que no tiene amor propio, ya que no se acepta tal como es y necesita hacer cambios en su aspecto físico para tener seguridad y sentirse atractiva.


En el corazón de Ana Magdalena se desata una tormenta de emociones desgarradoras al descubrir el oscuro secreto de la relación pasada de su esposo con una violinista china en la vibrante metrópolis de Nueva York. La revelación de esta traición sacude los cimientos de su mundo, sumiéndola en un abismo de dolor y desesperación. El dolor emocional que embarga a Ana Magdalena es como un torrente impetuoso que arrastra consigo la inocencia perdida y la confianza destrozada. Cada latido de su corazón resuena con el eco de la traición sufrida, lo que crea un eco doloroso que retumba en lo más profundo de su ser. La ira que arde en su interior es un fuego voraz que consume todo a su paso, envolviéndola en un manto de furia y resentimiento hacia su esposo y la otra mujer implicada en esta traición. Sus pensamientos están enredados en una maraña de preguntas sin respuesta, alimentando la confusión y la incertidumbre que la atormentan sin descanso. La respuesta evasiva y desconcertante de su esposo ante su interrogante sobre cuánto habría pagado en esa situación solo agrega más leña al fuego de su angustia emocional. La falta de transparencia y honestidad en esta situación la sumerge en un mar de desconfianza, erosionando los cimientos de su relación y dejándola a la deriva en un océano de incertidumbre. En medio de esta vorágine de emociones turbulentas, Ana Magdalena se aferra a un hilo frágil de esperanza, buscando desesperadamente un rayo de luz en la oscuridad que la envuelve. Cada lágrima derramada es un testimonio silencioso de la profunda herida emocional que ha sufrido, lo que marca el inicio de un doloroso proceso de sanación y reconstrucción de su ser destrozado. Según Quiroz Terraza (2017), realizar investigaciones sobre las percepciones sociales sobre la infidelidad entre parejas jóvenes es sumamente valioso e importante porque permite identificar y comprender las causas y consecuencias de las experiencias de infidelidad, así como profundizar en diferentes aspectos de la infidelidad. Esta investigación podría aportar información valiosa para futuros abordajes de estas situaciones, con una perspectiva mucho más amplia y diferentes opciones de solución del problema, dado ese caso Ana Magdalena experimenta un profundo dolor emocional tras conocer la relación pasada de su marido, se siente herida y desconsolada, con un fuerte odio hacia su marido y la otra mujer implicada, queriendo separarlos a ambos. Revelar la infidelidad despierta en Ana Magdalena una mezcla de dolor, rabia e incredulidad. La respuesta de su marido sobre cuánto habría pagado por ella, aumenta el tormento de Ana Magdalena y la sorprende. La protagonista siente una profunda pérdida de fe en su marido, creando un vacío desgarrador en ella y perdiendo la inocencia en el amor y la confianza. Se enfrenta a una situación emocionalmente devastadora que la deja en un estado de desesperanza y desilusión en el amor y la fe.


En una ocasión Ana Magdalena y su acompañante llegaron a un pequeño hotel de dos estrellas que el funcionario les había recomendado. Aunque modesto, estaba limpio y bien ubicado. Tomaron un taxi y se dirigieron a la orilla de la laguna donde se encontraba el hotel. “Me gusta el Hotel Senator, tiene su encanto”, comentó Ana Magdalena mirando el edificio. “Yo vivo del otro lado de la laguna y veo que lo han renovado recientemente”, añadió. Para llegar al hotel tuvieron que rodear la laguna, pasando por el humilde barrio de gente de escasos recursos. Al entrar, el amable portero los recibió algo desconcertado por la petición de una sola habitación. Explicó que la cama era algo pequeña, pero que podían agregar una cama plegable si lo deseaban. Se disculpó por las incomodidades y, tras bromear un poco, les ofreció otra opción en los pisos superiores, aunque sin vista a la laguna. Sin mucho equipaje, solo sus pequeñas maletas de mano subieron por el ascensor. Ana Magdalena se quedó en la habitación del segundo piso, agradecida por la amabilidad y cortesía del portero que los había atendido tan gentilmente. Ana Magdalena Bach no debió aceptar la insinuación de este hombre al decir que compartirían camas separadas en una sola habitación del hotel debido a que compartir un cuarto de hotel con un hombre es inapropiado para una mujer casada, pero esta no era la primera ocasión que tendría un acercamiento así con los hombres, ya que si recordamos ya hubo un acercamiento de ese tipo con otros hombres anteriormente. Aunque ella obtuvo otra habitación de hotel en el segundo piso, no debió aceptar el hecho de que el señor dijera que venían juntos. Ella quería seguir sintiendo el deseo de ser deseada como si aún fuera joven; sin embargo, no se sentía del todo satisfecha y muchas. En ocasiones quizá no nos son sentimos satisfechos con lo que buscamos lo que trae como consecuencia situaciones negativas. Ello no significa que dejemos de buscar algo que nos haga sentir bien. Según el Centro Manuel Escudero (2014), la incertidumbre es un sentimiento de ansiedad, malestar o miedo relacionado con diversas situaciones, tanto sociales como de toma de decisiones. La inseguridad puede ser causada por una percepción de uno mismo como vulnerable o por sentimientos de inestabilidad emocional que amenazan la autoestima. Las personas inseguras carecen de confianza en sí misma, en su valor y en sus capacidades. Pueden pensar que los demás los decepcionarán y de la misma manera, temen que ellos los decepcionen. La falta de confianza puede contribuir a la timidez, la paranoia o el aislamiento social. Esto puede fomentar conductas compensatorias como la agresión, la arrogancia o el narcisismo. Todas las malas decisiones que tomó Ana Magdalena radican en su inseguridad que siente sobre su edad, cuerpo y estatus que ella percibió tener, motivos que la condicionaron ser infiel en distintas ocasiones. También es evidente la falta de aceptación de Ana Magdalena, como derivado de la inseguridad, ya que se menciona en el cuento que cuando ella tiene estos encuentros se siente deseada como aquella mujer que ella percibió ser, lo cual sería el centro de todos los errores que ella cometió.

 

En síntesis, En agosto nos vemos destaca la reflexión sobre la fugacidad del tiempo, la importancia de valorar los momentos fugaces y el poder del amor. El autor invita a apreciar la belleza de lo cotidiano y a atesorar cada instante, lo que demuestra un profundo amor y conexión con su esposa. Asimismo, se resalta la importancia de la autoaceptación y la autenticidad en lugar de buscar la aprobación externa a través de cambios físicos, como se observa en el personaje de Ana Bach. Por otro lado, la historia de Ana Magdalena refleja el dolor emocional y la desesperación causados por la revelación de la infidelidad de su esposo. La traición descubierta sacude los cimientos de su mundo, sumiéndola en un abismo de dolor y desconfianza. La falta de transparencia y honestidad en la relación la sumerge en un mar de incertidumbre, erosionando los pilares de su amor y confianza. Por ello, las decisiones de Ana Magdalena, como aceptar compartir una habitación de hotel con un hombre y buscar la aprobación externa a través de encuentros inapropiados, reflejan su inseguridad emocional y la búsqueda de sentirse deseada y joven. La inseguridad puede llevar a comportamientos compensatorios y a tomar decisiones erróneas basadas en la falta de autoconfianza y aceptación. Finalmente, el texto aborda temas profundos como el amor, la traición, la autoaceptación y la inseguridad emocional a través de las vivencias de los personajes, invitando a reflexionar sobre la importancia de valorar los momentos presentes, la autenticidad y la confianza en uno mismo.

 

Referencias

 

Centro Manuel Escudero. (2014) Las raíces de la inseguridad. https://www.manuelescudero.com/que-es-la-inseguridad-y-%20como-se-trata/

 

Quiroz Terraza, L. E. (2017). Un estudio sobre la infidelidad en las relaciones de pareja entre jóvenes universitarios [trabajo de grado, Universidad Cooperativa de Colombia]. https://repository.ucc.edu.co/entities/publication/a5308250-ede7-49ec-bf9e-cddbbb323c5c

 

Sanchis, S. (21 de mayo del 2020). Qué es el amor propio, su importancia y cómo construirlo. Psicología Online. https://www.psicologia-online.com/que-es-el-amor-propio-su-importancia-y-como-construirlo-4953.html

 

 

Dato bibliográfico

García Márquez, G. (2024). En agosto nos vemos. Random House.

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